lunes, 1 de febrero de 2016

Pozos abiertos


Un día, algo cautiva nuestro interés. Cualquier cosa. Algo insignificante. Un capullo de rosa, un sombrero perdido, un jersey que nos gustaba de niños, un viejo disco de Gene Pitney... Una sucesión de pequeñas cosas que no van a ninguna parte. Durante dos o tres días, aquello ronda por nuestra mente y, luego, vuelve a su lugar de origen... La oscuridad. En nuestro corazón hay innumerables pozos abiertos que sobrevuelan los pájaros. 

7 comentarios:

Espérame en Siberia dijo...

Fragmento de "Escucha la canción del viento y Pinball 1973", de Haruki Murakami.

Fotografía de una pieza del artista mexicano, Martín Soto Climent.


Abrazos a todos :)

The Thinker dijo...

Precioso, profundo y cierto. Me encanta.
Un abrazo :)

Espérame en Siberia dijo...

Me alegra que te gustara, The Thinker.

Te mando muchos besos y abrazos :)

Myowndisaster dijo...

Los detalles que dan sentido a nuestra vida.... fijarse en ellos, amarlos, forma parte de la aventura.

abrazos

Espérame en Siberia dijo...

Sin duda. Y nunca perder la capacidad de asombro.

Abrazos para ti también :)

cantireta dijo...

En Twitter pasa eso: un pájaro que quiere un pozo al que hablar. Algunos me llaman y dicen que lo consigo, llamarlos pozos poéticos. Pero después se pierden entre el paisaje.

Muacs, bella! :-)

Espérame en Siberia dijo...

Jajaja, tienes razón. Parece que Twitter es lo más parecido a lo que narra Murakami.
Estos tiempos modernos.


Muá, lindura.