martes, 16 de febrero de 2016

Arquitectura yo

Al principio, la casa
se parecía a un cuerpo con un brazo amputado:
demasiado evidente que no estabas.

11 comentarios:

Espérame en Siberia dijo...

Poema de Josep María Rodríguez.
Fotografía hallada en Pinterest.

Les deseo una semana llena de palabras.

Un beso.

mukali dijo...

Que lindo!
La foto y el texto, una maravilla, lo dice todo.

Un abrazo.

hiro dijo...

Bonito poema! Las casas, sin las personas que las hacen especiales, dejan de ser "casa", hogar...
Quiero una furgo como la de la foto!

Besos :)

Espérame en Siberia dijo...

Querida Mukali, mil gracias por tu visita.
Qué lindo saber que todo te gustara.

Muchos besos y abrazos :)

Espérame en Siberia dijo...

Sin duda, querida Hiro. Una casa en esas condiciones, resulta inhabitable.

Muchos besos y abrazos :)

José A. García dijo...

Parece la combi de Cortázar, aunque con mejor color.

Saludos,

J.

Espérame en Siberia dijo...

Desconozco a qué combi te refieres, pero investigaré.

Un abrazo :)

Eva y la manzana dijo...

Así me siento en parte con mi propia partida. Parte de mi corazón se queda aquí, sólo que al mismo tiempo, en mi marcha, gano otra parte arrebatada.
Espero escribirte pronto, ahora que acabo de volver de Madrid y antes de marchar a Holanda brevemente.
Muchos besos y abrazos, Mariana querida, cuenta cómo te van las cosas.

Espérame en Siberia dijo...

¡Que esta etapa sea increíble para ti, Nerea preciosa! Deseo de todo corazón que encuentres lo que estás buscando.
Te mando muchos besos y abrazos.

En breve te escribiré, pero también cuéntame qué tal te ha ido en Madrid :)

Chaly Vera dijo...

Eso del brazo amputado tiene mucha razon.
Tuve que aprender a hacer las labores de la casa.

Besos

Espérame en Siberia dijo...

Jajaja, ni modo, Chaly.

Un beso.